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Los abstencionistas tendrán la última palabra

Un nuevo sondeo electoral resalta el camino ya iniciado hacia un sistema multipartidista, donde la alta abstención tendrá la última palabra acerca del futuro del propio sistema, tal y como lo conocimos hasta nuestros días.

Tabla1

El último sondeo de Celeste-Tel otorga la victoria al PP, pese a que este sufriría un descenso de 13,7 puntos porcentuales, lo que supondría una pérdida de 43/49 escaños, dejándole así con un total de 137/143 diputados, pese a ofrecer un leve crecimiento del 0,6% respecto al mes anterior.

El PSOE, conseguiría el 28,1% de los votos, otorgándole así, entre 114 y 116 escaños. La estimación ofrece una pérdida considerable de votos, que no se ve reflejado en el resultado final de diputados, debido al crecimiento de la abstención.

Por su parte IU y UPyD se quedarían 13,7% y 8,0% respectivamente, que se traducirían en 28/31 diputados para los de Cayo Lara, mientras que la formación magenta se quedaría con 12/15 escaños. CIU (2,4%), Amaiur (1,6%), PNV (1,4%) y ERC (2,3%), serían el resto de fuerzas políticas, que podrían por si solas formar grupo parlamentario propio.

Destaca del sondeo de intención de voto, no solo el hecho de convertirse el parlamento español en un sistema multipartidista, sino que también, que el Grupo Mixto, pase a contar con diez fuerzas políticas. Así, conseguirían representación parlamentaria, además de los ya mencionados, Equo (1), BNG (2), Coalición Canaria (CC-NC) (4), Compromís (3), Foro Asturias (FAC) (1), Geroa Bai (1), Partido Regionalista Cántabro (1), Més (1), Ciutadans (3) y la CUP (2) . Cobra especial relevancia, el hecho de que el total de votos del resto de partidos políticos, excepto PP y PSOE, suman más de dos millones en comparación con el 20 de noviembre de 2011.

Tabla2

Más allá del sondeo, ¿qué es lo importante?

Los datos del sondeo, son precisamente eso, una estimación de intención de voto, pero lo que se debe tener muy en cuenta, una vez más, es la tendencia existente, no solo la que anuncia el fin del bipartidismo imperfecto, ya tantas veces comentado, sino esa que hace presagiar una alta abstención, un 46,1% del electorado que no acudiría a la llamada de las urnas, 15 puntos más que en 2011.  Los partidos políticos, deberían dirigir la mirada con gran interés, a ese electorado joven (18-30), que en más de un 50% no ejercería su derecho a voto.

Tabla3

Lo que está claro, es que si el resultado es parecido al que se pronostica, la única gobernabilidad estable posible, será una «Gran Coalición», que de ocurrir sería la tumba del PSOE, al igual que le ocurrió al PASOK griego.

Según la estimación de Celeste-Tel, el PP, pierde casi cinco millones, y el PSOE dos millones, llevando acumulado desde 2008 una pérdida de más de seis millones, lo que suma más de once millones de votos en total, entre los dos grandes partidos. IU parece encontrar, al menos hasta ahora, su techo electoral en menos de los tres millones, debido en gran medida a ser identificados como la izquierda del siglo XX, lo que les hace imposible a priori superar ese techo. Mientras UPyD, crece a costa del Partido Popular, y en menor medida del PSOE, pero encuentra grandes dificultades, en aquellos lugares donde los nacionalismos periféricos son muy fuertes. CIU por su parte, se deja medio millón, votos que en su mayoría nadie recoge. Todo ello, hace crecer la abstención más de cinco millones respecto a las elecciones pasadas.

Llegados a este punto, que todo hace indicar que sea de no retorno, en cuanto a recuperación electoral de PP, y también del PSOE, aunque de este deberemos esperar a ver como, cuando y con quien, se produce la tan ansiada regeneración que aun no ha tenido lugar, y que puede provocar, que parte de su electorado que ahora se iría a la abstención u otras fuerzas políticas, vuelvan a confiar en los socialistas, aunque nunca como en los niveles de 2008.

Pues bien, la clave aquí no es otra, que la decisión que pueda tomar ese electorado abstencionista ahora mismo, y que más de uno, se ha apresurado a calificar como espacio electoral de ruptura.

¿Qué se entiende por espacio electoral de ruptura?

Este espacio electoral de ruptura, viene a identificar a esa parte del electorado, que ahora mismo está en la abstención, y que podría optar por candidaturas alejadas de los partidos tradicionales, lo que se ha denominado como candidaturas de ciudadanos, y que propugnan la regeneración del sistema político existente. Este fenómeno no es nuevo, ya ha ocurrido en Portugal, donde las candidaturas de independientes han logrado un gran resultado en las elecciones municipales, haciéndose con la victoria en Oporto y Sintra. También en Grecia, donde Syriza ha sabido captar este espacio, convirtiéndose así en la segunda fuerza del país, y por supuesto en Italia, donde el Movimiento Cinco Estrellas, se convirtió en el partido más votado (si exceptuamos las coaliciones electorales) en las pasadas elecciones generales.

Está por ver, si este fenómeno común a los países del sur de Europa más asolados por crisis, tiene lugar en España, y a cargo de quien. De lo que no cabe duda, es que si algún movimiento/partido consigue captar a parte de este electorado, tendrá el éxito asegurado en las siguientes elecciones.